Punto Nemo

Tengo una pequeña historia acerca de este libro (bueno de casi todos de los que he hablado aquí), en la entrada de Los hijos del Capitán Grant la mencioné pero aquí se las cuento.  Hace unos 4 o 5 años empecé a leer enserio y el primer autor que recuerdo haber tomado de forma recurrente fue Jules Verne. Este autor está en mi imaginario desde que soy niño y títulos como “La vuelta al mundo en ochenta días” o “Veinte mil leguas de viaje submarino” me fueron presentados en versiones infantiles y reducidas en los libros de lecturas de la primaria. Así que me decidí a leer sus novelas más conocidas, entre ellas “De la tierra a la Luna”, tomé el libro de la biblioteca y lo empecé a leer, recuerdo haber leído los primeros capítulos y sentir una barrera, un bloqueo con este libro que no me permitió seguir leyendo, no sé porque se me hizo aburrido, así que decidí dejarlo y seguir con otros libros. Cuando empecé esta colección de libros de Julio Verne, unos de los primeros tomo...

En primer lugar, tengo que confesar que no pude evitar hacer una comparación de este cuento con su versión cinematográfica en todo el transcurso de mi lectura, me declaro culpable de este vergonzoso pecado. Tomé el libro de una estantería de la biblioteca, no es la primera vez que veía aquel libro, hace unos 15 años, en la pequeña biblioteca de mi escuela, recuerdo haber visto aquel libro, según yo la mismita edición, pues la portada y los colores siguen frescos en mi memoria. Cualquier amante de los libros (supongo que tú perteneces a este grupo, pues este es un blog de libros), inmediatamente siente una empatía hacia Matilda, la pequeña niña de 4 años que va sola a la biblioteca local todos los días, después de que su hermano se va a la escuela, su padre al trabajo y su madre al bingo. Cuando sus padres se dan cuenta que tiene que ir a la escuela, el destino la cruza con una mujer inteligente y amorosa, su maestra, la señorita Honey, el único adulto en la vida d...